jueves, 15 de febrero de 2024

LETANIA ; Miguel Méndez Camacho





Señor, dale una oportunidad a los virtuosos

y déjalos caer en tentación 

para que no condenen 

a quienes descubrimos que el abismo

es sólo otra variante del camino.

Señor, no prohíbas la gula de los míseros

ni la violencia de los débiles

ni la avaricia de los desposeídos.

Señor, otórgale soberbia a los humildes

para que no rediman a sus amos

permitiéndoles ser caritativos.

Refresca, Señor, la desmemoria moralista 

y diluye las sombras que confunden

la castidad del indeciso.

Permítenos, Señor, desear la mujer 

y no la ruina de nuestros deudores 

y deja que sea el prójimo 

quien tenga que poner la otra mejilla.

Señor, si este reino no es tuyo

como dicen

quita la viga de mis ojos 

y cámbiala por la paja de los de mí vecino

y déjanos el goce de caer y recaer 

en los viacrucis de culpas inconclusas

para el juicio final de los remordimientos

por los pecados que desconocimos

o nos fueron negados


en la resurrección de los cuerpos 

que comienza 

ahora y en la hora de nuestra muerte, amén.

martes, 5 de septiembre de 2023

MANUAL PARA CONDUCIR ; Gioconda Belli

Para surcar mi cuerpo sobre iluminadas autopistas, despójate de medidas de seguridad y avanza cuan largo eres sobre mí.

En la piel de este territorio no hay más límite de velocidad que la destreza de aferrar el volante sobre las curvas más densas del camino.

Con los faros abiertos y encendidos habrás de recorrerme como una ciudad extendida de barrios ensimismados; descubrir tras puertas y ventanas el perfume de jardines ocultos.

Lo mismo te asaltará el aroma de las huelenoche que las plantas carnívoras te arrastrarán hasta que aúlles suplicante.

A vos, amo de los carburadores relucientes, yo te enseñaré a desear el agreste terreno de los cauces y el abismo donde despeñar todos tus artificiosos instrumentos de navegación.

En el placer de infinitas revoluciones por minuto, de nada te servirán los frenos; los engranajes. Es mejor que te rindas de antemano cuando cruces hipnótico las avenidas anchas y quietas donde vagan sueltas las fieras salvajes de mi ciudad encendida.

Descalzo y desnudo ambularás los rascacielos de papel y las sombras solitarias que se esconden bajo los puentes de mi espalda. Vagarás indefenso por las esquinas ignotas de mis rodillas.

Creo que te advertí que en mi ciudad no hay candados y los zoológicos se abren de par en par al atardecer. Un cuerpo de mujer es también un acertijo siniestro donde puedes estallar. Podrías sucumbir antes de ascender la última colina y caer de bruces en el ombligo.

Las posibilidades son innumerables.

Sin embargo enuncio mi promesa: Si te atreves autonauta sobre mis iluminadas autopistas, aun cuando me lo implores no temas, no te lo concederé.

Hombre. Hombrecito mío. Te doy mi palabra. No te mataré.

jueves, 18 de junio de 2020

BORRACHOS; Carlos Buitrago


Hay borrachos de borrachos
que como cualquier mundano
en el licor encuentran
su efímero placer.
Borrachos familiares
que destruyen hogares por doquier.
Borrachos solitarios y vaciados
que sin cinco y sin amigos beben también.
Borrachos tradicionales 
que beben por beber.

Hay borrachos soñadores
cazadores de quimeras
que incrementen ilusiones que creer.
Borrachos pesimistas
que cuando el licor escasea
se funden en el andén.
Borrachos religiosos
que beben, porque a Dios no pueden ver.
Borrachos indiferentes
que beben por desdén.

Enamorados que no beben,
sino lo que les ofrece ese ser.
Borrachos literarios
con la rasca viva, siempre de leer.
Con lo que sea que se embriague
la mundana alma
siempre busca algo que absorber.
Borrachos de borrachos
entre los que me incluyo
yo también.





miércoles, 30 de agosto de 2017

HOMBRE SENTADO EN UN ESCAÑO DE PIEDRA ; Romulo Bustos Aguirre



Justo es imaginar que viene de muchas partes
sin cicatrices visibles
Imaginar que ha mirado todos los horizontes
bebido de toda agua
Habrá entendido ya que hay tanto de trampa
en esta vida
de la que sólo ha rozado su misterio
Podemos incluir dos o tres remordimientos
que nunca faltan en el inventario de un hombre
Imaginar también su vuelta lenta a una estancia
verlo hundirse bajo las sábanas 
y repetir puntual
este viejo ensayo de la muerte.

ELLA VENDRÁ ; Dario Jaramillo Agudelo



Volando o de golpe, como quieres
o sigilosa y lenta:
serás tu corazón esperándola,
serás solamente una de tus vísceras,
serás tu estómago tratando de digerirla
o tu pulmón que la recibe mientras  le dices adiós al aire.
Inexorable por a o por be
ella vendrá
la única segura,
ella vendrá intempestiva o anunciándose.
Tú la prefieres gentil: una noche te acuestas a dormir
y antes de amanecer, sin despertarte,
ella te abrazará para siempre.
Pero no sabes.
Al menos un avión que se desploma
no causa tantas molestias y esperas angustiosas.
Ella vendrá, tal vez haciéndose esperar, anunciándose.
Ella vendrá, a lo mejor intempestiva,
ella vendrá y entre tanto
sin el cuándo y el cómo
cada vez esta más cerca
en cada instante que transcurre
eres más y más de ella,
la segura.



martes, 6 de junio de 2017

POEMA CON GATO; Luz Mary Giraldo



Como el gato
el poema se niega a la caricia.
Juega 
camina caprichoso
busca el lugar más elevado
salta
rechaza el sitio inhóspito
            desciende
            husmea
            escarba 
aleja la carroña
           las cenizas
deja en silencio la soledad
           y la palabra. 

ALBEDRIO; Hernando Guerra Tovar



De los escombros elige el que te guste.
Hay azules cielo despejado,
Para aquellos que sueñan paraísos 
donde la luz no alcanza.
Hay verdes, como el vientre del bosque,
colmados de hojas y de alas.
Los hay rojos como la sangre
que se vierte en cada guerra, en todo vino.
De los escombros elige el que te guste.
Hay variedad de grises olor a bruma.
El negro escondido en algún rincón de la tiniebla.
El blanco páramo.
El que inventa...

martes, 30 de mayo de 2017

LA NOCHE; Alejandra Pizarnik



Poco sé de la noche
pero la noche parece saber de mí,
y más aún, me asiste como si me quisiera,
me cubre la conciencia con sus estrellas.

Tal vez la noche sea la vida y el sol la muerte.
Tal vez la noche es nada.
Y las conjeturas sobre ella nada
y los seres que la viven nada.
Tal vez las palabras sean lo único que existe
en el enorme vacío de los siglos
que nos arañan el alma con sus recuerdos.

Pero la noche ha de conocer la miseria 
que bebe de nuestra sangre y de nuestras ideas.
Ella ha de arrojar odio a nuestras miradas
sabiéndolas llenas de intereses, de desencuentros.

Pero sucede que oigo la noche llorar en mis huesos.
Su lágrima inmensa delira 
y grita que algo se fue para siempre.

Alguna vez. Volveremos a ser.

CONVERSACIÓN CON MI HIJA ; Maria Mercedes Carranza


Muchas cosas pasarán sobre tu cuerpo
lluvia, deseos, labios, tiempo
gastarán tu piel y por dentro tu alma.
A menudo tendrás que saludar 
a la fe, a la esperanza,a la caridad.
Son cuestiones inevitables,
usa la cortesía y santas pascuas.
Te acosarán a respuestas blanco sobre negro
y viva la civilización, te gritarán
y cuando entiendas por fin que el mundo
es redondo habrás perdido para siempre.

Sobre tus hombros la llevarás,
a la civilización te digo,
vestida de gringa, o de sueca o de japonesa:
esta dama lee a Platón,
se bendice la axilas con desodorantes,
toma coca cola y no permite
que la saluden con el sombrero puesto.
Usa siempre la cortesía y 
no se te olvide, hija
lavarte los dientes todas las mañanas
y apagar la luz antes de dormir.

jueves, 13 de abril de 2017

CONCIENCIA; Mario Benedetti







La conciencia es ubicua
la siento aveces en el pecho
pero también esta en las manos
en la garganta en las pupilas
en las rodillas en los pulmones
pero la conciencia más conciencia
es la que se instala en el cerebro
y allí ordena prohíbe festeja
y hasta recorre interminablemente
los archipiélagos del alma

la conciencia es incómoda
impalpable invisible pero incómoda
usa el reproche y las bofetadas
las penitencias y el sosiego
las recompensas y las paradojas
los gestos luminosos y los libertarios
pero la conciencia más conciencia
es la que nos aprieta el corazón
y vaga por los canales de la sangre.



jueves, 2 de marzo de 2017

LAS PALABRAS PERDIDAS; Gonzalo Marquéz Cristo



Alguien descifra la escritura de la lluvia y sin embargo
no puede escapar

Un alud de imágenes nos extravía la palabra; acudimos 
al grito y al llanto, a veces a la indiferencia, pero sabemos que necesitamos de la guerra para ser inocentes.

Todo lo ha ofrendado la ceniza

Desde que desenterramos a la noche desaparecieron 
las más profundas alianzas y nuestros perseguidores pueden encontrarnos.

Una herida siempre recuerda la vida, todo nacimiento 
procede de su túnel. Un árbol arde en nuestros ojos de agua.

La verdad- es decir lo prohibido -, impone su reino de terror...
y hemos decidido habitarlo con las manos entrelazadas.

Creímos que la poesía nos enseñaría a morir...

Persistimos... Con frecuencia hacemos la extraña sonrisa
del miedo. Sí, huimos, la soledad convertirá a alguien en 
víctima. Por eso la palabra se pasa de mano en mano para construir una morada invisible.

A veces para sobrevivir renunciamos al conocimiento.

Y cuando todos duermen escribimos... Pero un poema es el 
fósil de un sueño, el cadáver de un dios..

¿Aún podremos salvarnos?

ZOO ILOGICO ; Mario Benedetti.


Una mona nupcial espulga tiernamente
al chimpancé que trama su próximo adulterio.

Cuatro hienas giocondas se sonríen
y las hormigas trepan sobre el oso hormiguero

 al camello le pican las jorobas
sueña el lirón que está duermiendo

un águila imperial vuela y revuela
en la jaula gigante que es ahora su imperio

el áspid vive henchido de cleopatra
el cándido hipopótamo desplaza su universo

el león ya no ruge/ carraspea
y abandona sus viejas glorias en el estiércol

el elefante añora el bazar de su fama
la cierva mira irónica las astas de su ciervo

la espléndida jirafa es un lugar común 
a nadie le interesa la esbeltez de su cuello

las avestruces odian a su vecino ñandu
ese pariente pobre/ ese remedo

los pingüinos/ conscientes de su alcurnia
son plenipotenciarios del invierno

en su laguna verde/ silenciosa e inmóvil
cocodrilos circulan como balsas de cuero

los delfines se burlan de la vida y de la muerte
pende en su ergástula el murciélago

y el homo sapiens/ sólo / entre tantas criaturas
finge creer que el mundo es apariencia y juego

a pesar de que sabe que hoy y mañana y siempre
lamerá sus barrotes como otro prisionero.

martes, 31 de enero de 2017

ORACIÓN; Juan Gustavo Cobo Borda



Tu piel
la sabiduría de tu piel
recóndita frescura
la enfermedad de tu piel
antídoto
resurrección húmeda
las palabras de tu piel
desconocida
tu piel esbelta
estricta piel
las cicatrices
y el llanto de tu piel
el espejismo de tu piel
desvelada tortura
la piedad generosa
de tu piel
sensible
los nervios de tu piel
hasta decir no más
hasta llenar el cuarto
invadir la ciudad
cubrir todo cuanto
miro
       veo
toco.

POEMA DE LA PROFUNDA DESPEDIDA; Hector Rojas Herazo



Por última vez 
toma el íntimo fuego de mis manos
y el brillo de mis ojos en tu cuerpo.
No olvides la manera que teníamos
de andar entre los seres
y  de mirar el agua y las palomas.
No olvides el color de los almendros
ni el ojo de las bestias
ni el brocal de los ojos conocidos.
Por última vez
toma esta torre y esta tarde amada
que se irán con tu sangre para siempre.
Toma el sabor maduro de los frutos
y el color de mi piel y de mi traje.
Por última vez 
contempla la estatura de mi cuerpo,
la forma de mis labios
y el beso de mi voz en tus cabellos.
Por última vez
bebe el sonido transparente y vago
del cielo entre los árboles inmensos.
Y recuerda la lluvia y los caminos
cuando éramos los dos una mirada
repetida en la niebla por el viento.
No olvides las palabras detenidas
como pájaros ciegos y vencidos
ni el latido profundo de mis venas
al dejar nuestras huellas en la arena.
Recuerda la frescura de los cántaros
a la hora del azahar y de los besos.
No olvides las estrellas
miradas por los dos bajo la bruma.
No olvides mi manera
de ser feliz ante los hechos simples:
de tirar piedrecillas en el agua
de cantar en la yerba
o de mirar el vuelo de las nubes
en el húmedo cielo de tus ojos.
Ahora sabrás esta costumbre mía 
de regalarte cosas fugitivas:
el aroma de un huerto, la mañana
durmiendo sobre un lirio estremecido,
una palabra vaga
o una espiga sin sabia ni sentido.
Por última vez
toma el dolor de este silencio mío,
toma la olaridad de mi agonía;
mira el muro de yedra envejecida, 
el patio solitario
y esta breve colina donde flota
el herido temblor de mi pañuelo.
Escucha siempre este secreto llanto
que resbala sin rumbo por mis huesos.
Toma mi soledad y mi dulzura
y viaja con mi nombre hasta la muerte.

sábado, 21 de mayo de 2016

PROVERBIOS; Harold Alvarado Tenorio.



No hables.
Mira cómo las cosas a tu alrededor se pudren.
Confía sólo en los niños y en los animales
y de los ancianos aprende el miedo a haber vivido demasiado.
A tus contemporáneos pregunta sólo cosas prácticas
y comparte con ellos tus fracasos, tus enfermedades,
tus angustias, pero nunca tus éxitos.
De tus hermanos ama el que está lejos
y teme al que está cerca.
A tus padres nunca preguntes por su pasado
ni trates de aclarar con ellos tu niñez y juventud.
Con tu patrón no hables, escríbele, y nunca le cuentes
tus planes futuros y miéntele respecto a tu pasado.
Con tus colegas habla del clima, el aumento de salario
y elogia con vigor sus faltas.
Ama a tu mujer hasta donde ella lo permita
y si llegas a tener hijos, piensa que, como en los juegos de azar, podrás ganar o perder.
El destino no existe.
Eres tú tu destino.
Y si llegas a la vejez
da gracias al cielo por haber vivido largo tiempo,
pero implora con resignación por tu pronta muerte.
Los que no tenemos dinero ni poder valemos menos
que un caballo, un perro, un pájaro o una luna llena.
Los que no tenemos dinero ni poder siempre hemos callado
para poder vivir largos años.
Los que no tenemos dinero ni poder
llegados a los cuarenta
debemos vivir en silencio
en absoluta soledad.
Así lo entendieron los antiguos,
así lo certifica el presente.
Quien no pudo cambiar su país 
antes de cumplir la cuarta década 
está condenado a pagar su cobardía por el resto de sus días
Los héroes siempre murieron jóvenes.
No te cuentes, entonces, entre ellos.
Y termina tus días
haciendo el cínico papel de un hombre sabio.


miércoles, 11 de mayo de 2016

EL MÁS ALTO EROTISMO; Gioconda Belli



Es la hora de la idea.
La hora del más alto erotismo,
del cuerpo reflexivo
meditando los trasiegos:
la materia hecha elixir
el sexo vertiendo olor a biblioteca
olor a libro antiguo
y delicioso.
Lees mi piel ahora
como una Biblia leída y vuelta a releer
que contuviera todas las posibles oraciones
necesarias para la humana salvación.
Con los ojos cerrados
sabes llegar al capítulo del clímax
al fragmento más lírico
o a las aún indescifrables profecías.

Es la hora del sabio escriba
que con la pluma de tinta húmeda
la mano sin temblores
traza el placer
con la caligrafía exacta. 

martes, 10 de mayo de 2016

COMUNICACIÓN CON DIOS; Gonzalo Arango



Para encontrase con el cielo
no hay que ir a las iglesias
ni en cohete.
La comunicación con dios es una flor
el astro transitorio
la lombriz de tierra,
la morada de amor del hombre
y de su hembra.

miércoles, 13 de abril de 2016

RECOBRANDO EL PARAÍSO; Juan Gustavo Cobo Borda.



La fatiga de los cuerpos
y su leve sueño cómplice
luego de haber trabajado
arduamente su dicha

La dulce confianza
de quien deja atrás 
toda crispación
y se entrega a este juego
vago y somnoliento,
la errante caricia de un niño
antes de dormir.

Quien ha bebido tu semen
y acariciado tu ano
se ha ido ahora
en medio de la paz obtenida.
Duerme sobrecogiéndote
con la simple certeza
de su estar ahí.

Uñas roja de una mano
que te desvelara para siempre
siendo exigente y piadosa a la vez.

Vello negro sobre una piel más clara:
la vieja herida del sexo
pide ser cicatrizada
de nuevo

La sombra de la Ley es la Culpa
pero la oscura tibieza
entre tus nalgas y tus muslos
se llama Paraíso.

Allí la lengua 
recobra un sabor antiguo.
Húmeda de dicha,
algo animal la arrulla
con balbuceante saliva.

Sagrado es 
quien venera
lo mal llamado sucio
con tan devota lentitud.

Su agua bondadosa
te renueva
y una elástica alegría
borra cuanto te ha afligido.

Deslízate, en consecuencia
adentro de ese otro cuerpo
y fluye con él.

El deseo clarividente
te ha conducido
hacia quien aguarda 
con brazos aun más firmes
que la desidia de los hombres
en medio de este planeta estropeado.

Compartiendo un sueño
el olvido benévolo
nos concede su indulto:
el paraíso está aquí.