olvida,
Sino nos cuida, como el padre y la madre después de
haber gozado
El cuerpo se levanta en la noche para velar al hijo
que odian
Nos acaricia la planta de los pies en el lecho donde
nos ayuntamos,
Solícita. En vano propone una eternidad falaz,
Celestina
De las almas, afrenta de dioses que no existen al
hombre.
En vano se deseperan los amantes por no ser
inmortales
Son ellos su destino, mas se castran. Cambian su
obra
Por dos billetes de banco : uno la fe; otro la justicia.
En vano siempre. Mueren sin vivir todo lo que
humano es
En la tierra o el infierno. La carne que alzarlos debió,
los abaja.
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